“La noche es HOY”
A la sombra del santuario original tuvo su encuentro la Juventud Femenina Internacional. Una instancia que reunió a más de 800 jóvenes de distintos países, un encuentro que marcó hito en la historia de la JF. Reunidas esperaron las 00.00 hrs. del 18 de octubre, en el lugar de origen y juntas coronaron a nuestra Reina, a través de un solemne y emocionante acto.
“La noche es hoy” fue el nombre de la vivencia que comenzó en la histórica casa de la Juventud Femenina en Schoenstatt, llamada Sonnenau. Las niñas hicieron una cadena humana hasta el santuario original y de mano en mano, una pequeña corona –símbolo propio de la JF llamado RTA – fue llevada hasta la capilla.
Las niñas se sentían completamente emocionadas. Aquel símbolo ha sido muy importante en su historia, porque fue el mismo Padre Kentenich quien regaló a las jóvenes una corona diciéndoles “Sean ustedes mi corona (viviente)!”. De esa forma, de generación en generación se ha traspasado una corriente de vida en torno a esa RTA.
Una vez llegada la corona hasta el Santuario, realizaron la emotiva cuenta regresiva para esperar las 00.00 hrs y así recibir el comienzo de los nuevos tiempos. Juntas cantaron antiguos himnos de encuentros internacionales, rezaron y recibieron el 18 de octubre con su acto de coronación. “El acto de coronación fue algo muy importante para el futuro de la Juventud Femenina. Nunca había sentido tanto que la Juventud Femenina Internacional estuviese tan unida en su corazón. Dios estuvo aquí a esa hora. Fue mucho el tiempo de preparación, estoy segura que será fructífero”, dijo la Hna. M Anastasia, Asesora nacional de la Juventud Femenina de Alemania.
El acto fue guiado por tres jóvenes, de habla hispana, inglesa y alemana, quienes junto a un grupo seleccionado para estar dentro del Santuario, colocaron la pequeña corona RTA detrás de la corona que lleva el cuadro de la MTA. Theresia Strunk, representante de la juventud femenina de Alemania dijo “Antes de la coronación, escuché una oración de las chicas de Chile, que hablaban de su alegría a nuestra coronación. Para mí, es un regalo muy grande (¡un milagro!) el tener un símbolo, un ideal común que fascina a niñas de todo el mundo y nos une. Eso sentí en la noche de nuestra coronación. Nos comprometimos a nuestro Padre, a nuestra Mater para el Schoenstatt de los próximos 100 años”.
Los nuevos tiempos se iniciaron con toda la originalidad y misión de la Juventud Femenina de Schoenstatt. La emoción en los rostros era evidente. Incluso un grupo de ellas, selló su Alianza de Amor a la luz de los próximos 100 años. ““Para mí fue un momento súper emocionante, después de muchos años de preparación hicimos real nuestro gran anhelo de entregarle a la Mater nuestra vida para la Iglesia. Realmente se sintió mucha alegría y emoción recibir juntas el jubileo, ahora nos toca a nosotras santificar nuestras vidas para el próximo siglo de nuestro Schoenstatt” señaló Juliana Zurita de Argentina. Schoenstatt era una revolución femenina, simplemente una revolución de mujeres que anhelan altos ideales para el mundo de hoy.
A partir de ahora, este gran momento quedará en el corazón de todas aquellas que fueron parte de la Generación 2014. Y lo mejor de todo esto es que no sólo se vivió en Schoenstatt, sino también en todos los países del mundo en donde hay Juventud Femenina. La corona RTA permanecerá en el interior del Santuario Original desde hoy hasta siempre. Hace 100 años fueron sólo varones los que dieron todo por amor a María, hoy también son protagonistas de la historia, mujeres auténticas y alegres de llevar la misión de la inmaculada. ¡Ser coronas vivas!